Por Elsie Méndez @sabormexico
Hacer huevos duros es una habilidad culinaria esencial, y aunque parece fácil, los resultados a menudo no son perfectos. Tanto si quieres un desayuno rápido y saludable como si quieres hacer unos deliciosos huevos rellenos, es imprescindible saber cómo hervir los huevos a la perfección en todo momento, y saber lo que no hay que hacer.
Los dos problemas más comunes que surgen al tratar de hacer huevos duros son un nivel de cocción inadecuado (porque a nadie le gustan las yemas verdes sulfurosas) y cáscaras de huevo que simplemente no se desprenden sin llevarse un gran trozo de la clara.
Cinco pasos para cocinar los huevos duros perfectos y fácilmente
Paso 1: Utilizar los huevos adecuados
Lo mejor es utilizar huevos que hayan pasado su punto máximo de frescura, obvio que no estén caducados o en mal estado. La membrana exterior de un huevo fresco tiende a adherirse más a la cáscara que la de un huevo viejo, lo que dificulta el proceso de pelado.
Paso 2: Poner los huevos en una olla
Coloca los huevos en una olla, cúbrelos completamente con agua fría, hasta tres dedos sobre los huevos, y pon la olla al fuego. Añade un pequeño chorro de vinagre blanco, si lo deseas. Se dice que ayuda a pelarlos, yo nunca se lo pongo pero mi suegra si, es como remedio de abuelita.
Paso 3: Poner el agua fría a hervir a fuego alto
Una vez que los huevos, el agua y un pequeño chorrito de vinagre estén en la olla, pon el agua fría a hervir a fuego alto, dejando la olla destapada. Una vez que el agua llegue a un hervor burbujeante, baja a fuego medio-bajo, tapa la olla y deja que se consuma prácticamente toda el agua. Este tiempo garantiza que los huevos estén perfectamente cocidos, con yemas de color amarillo brillante y claras no gomosas.
Paso 4: Dar a los huevos un baño de hielo
Saca los huevos del agua caliente y ponlos en un bol grande con agua helada para detener el proceso de cocción y bajar la temperatura de los huevos. Cuando los huevos alcancen la temperatura ambiente, es el momento de pelarlos; si están más fríos, serán más difíciles de pelar.
Paso 5: Pelar los huevos
Pasa el huevo por debajo de la palma de la mano en la encimera para que la cáscara se rompa y se agriete por todas partes, y luego sumerge el huevo en tu cuenco de agua a temperatura ambiente. Esto ayudará a aflojar la membrana que une la clara con la cáscara. Mientras el huevo sigue sumergido, empieza a pelarlo. También puedes optar por pelar los huevos bajo el chorro de agua del grifo para que la presión añadida del agua también sirva para quitar la cáscara, aunque esta opción gasta mucha agua y es menos ecológica.
Y ya está. ¡Huevos duros perfectos! Tus deliciosos huevos ya están listos para cualquier preparación. Córtalos en rodajas y espolvoréalos con sal, ponlos en capas en una ensalada Cobb, conviértelos en deliciosos huevos rellenos.