Sopa de Canicas de la abuela
Nada más sabroso y sencillo que esta sopa de canicas. Su preparación es de lo más simple. Estoy segura que se convertirá en una de sus favoritas.
La mejor manera de aprovechar las tortillas viejas
Cuando le pregunte a mi abuela de donde había sacado esta receta dijo que no lo recordaba, solo que era una sopa que usualmente la hacían para aprovechar de las tortillas que se iban haciendo viejas o se hacían duras, esta era una forma muy sabrosa de sacar provecho de ellas y no tirarlas a la basura – En mi tiempos hija, todo se usaban, el desperdicio era mínimo, no como ahora que hacen un montón de basura -.
Y tiene razón, no hay porque tirar las tortillas que se van haciendo duras o feitas sin con ellas puede salir algo tan sabroso.
Puedes cambiar el queso añejo por cotija
Para hacer la Sopa de Canicas esto es lo que vamos a necesitar
- 12 tortillas
- 1 taza de leche caliente
- 50 gr de queso añejo o cotija rallado
- 1 huevo
- 10 Hojas de epazote
- 1/2 taza de harina de maíz
- 1 lt de caldo de pollo
- 2 jitomates saladet
- 1/2 cebolla
- 1 ajo
- sal al gusto
- aceite para freír
Vamos a preparar paso a paso
Lo primero que haremos será el caldo para que vaya cociéndose mientras hacemos las canicas. Para ello vamos a licuar el jitomate, la cebolla, el ajo. Colocamos una olla a fuego alto con dos cucharadas de aceite y cuando este caliente colamos la mezcla del jitomate y dejamos que se sazone muy bien, que se cueza bien el jitomate. Ya que cambie de color añadimos el caldo de pollo. Pueden agregar más si les gusta bien caldoso.
Ahora toca preparar las canicas. En un recipiente hondo ponemos las tortillas cortadas en trozos y les añadimos la taza de leche caliente. Dejamos remojar unos 30 minutos, ya que estén bien suaves las tortillas las molemos en el procesador para que se mezclen bien y queden en una masa suave.
Transferimos la mezcla de tortillas en un recipiente hondo y les añadimos el huevo, el epazote picado finamente, y la harina. Mezclamos muy bien para que todo se integre de forma tal que tengamos una masa suave y firme.
Con las manos formamos bolitas pequeñas y las colocamos en una charola una a una. Dejamos aparte.
Ahora calentamos una olla con suficiente aceite, una a dos tazas y ya que este bien caliente vamos añadiendo las canicas o bolitas y las freímos muy bien cuidando de no quemarlas.
Las ponemos sobre una servilleta de papel para que absorva el exceso de grasa.
Ya que están todas bien fritas, ponemos las bolitas en la olla del caldo y dejamos de de un pequeño hervor con ellas dentro.
Sirvan bien caliente y disfruten!
Otra rica sopa que a todos nos encanta Sopa de Frijol negro aquí nuestra receta del recetario de la abuela