¡Ricos Tamales Calientitos! Así se escucha por las calles de todo México de un altavoz montado en una bicicleta con canastilla donde vienen las ollas tamaleras y otras más con atole, champurrado y hasta cafe; sin olvidar las teleras o bolillos para las tortas por la mañana. El Tamal, platillo insignia de la gastronomía mexicana de orígenes prehispánicos y que ha evolucionado a través del tiempo pero sin perder su esencia. Hoy les quiero contar del origen e historia del tamal, para que la próxima vez que se coman uno lo agarren más cariño y vean por qué parte importante en la cocina mexicana.
El nombre Tamal proviene del vocablo Tamalli que en Náhuatl significa envuelto. Con más de 500 años de historia, el tamal es uno de los platillos icónicos y más tradicionales de la comida mexicana. Aunque en algún punto hubo polémica de si provenía de Perú, Chile, Bolivia y hasta Argentina; los historiadores han dejado claro que el origen del tamal es 100& mexicano, ya que México es cuna del maíz, el ingrediente principal con el que se elabora el platillo
Origen del Tamal
Como ya les comentaba, las investigaciones señal que los tamales nacieron en México, así que ya quedo aclarado el origen. Durante la época prehispánica el tamal no era como lo conocemos ahora, tenía una textura más dura y no eran tan esponjosos como los que comemos hoy día.
Comer tamales en febrero ya era una tradición desde la época prehispánica ya que es en este mes que se le daba gracias por las semillas y se creaban ofrendas para bendecirlas. También durante las mismas fechas se conmemoraba una celebración llamada Atamalcualiztli, que tenía como finalidad hacer un homenaje a Tláloc, Dios de la Lluvia, para que obviamente les ayudara con las cosechas.
En las crónicas de Fray Bernardino de Sahagún comenta que fueron los Mexicas los que llevaron los tamales ,a otros puntos de Mesoamérica y más allá por los pueblos y regiones que habían conquistado y formaban parte de su imperio.
De acuerdo a los escritos de Fray Bernardino los tamales se rellenaban de calabaza, frijoles, chiles y en ocasiones les agregaban pavo, conejo, pescado y otros animales de aquellos tiempos. Describe que los envolvían en las mismas hojas del maíz. Estos se colocaban en ofrendas y altares dedicados a la Diosa del Maíz tierno, Xilonen y al famoso dios de la guerra Huitzilopochtli.
Los tamales desde aquellos tiempos, han sido un platillo para compartir y ser parte de celebraciones comunitarias, ya fueran en fiestas dedicadas a los dioses y como ofrenda a los muertos y a la tierra por las fertiles cosechas.
Receta de tamales verdes y rojos
Hacer tamales en casa no es tan complicado como pareciera. Te dejamos nuestra receta básica para hacer tamales rojos y verdes. ¡Ponte el delantal y a darle!
Historia y tipos de Tamal
Es claro que con la llegada de los españoles el tamal evolucionó hasta lo que hoy conocemos. Primero que nada el relleno, de solo aves, huevos de insectos, los mismos insectos y hasta ranas; con el delicioso cerdo encontramos que esas salsas que también cambiaron al agregarles cebolla y ajo, y los moles que se hicieron más complejos con las especias, los guisos con los que se rellenaron fueron cambiando, en mi opinión, para bien. Por qué no me podrán negar que esos tamales verdes con carne de cerdo o hasta de cochinita pibil si se antojan más que con solo calabacitas y guajolote – que la carne no es tan suave como la de los pavos que en la actualidad consumimos de forma regular -.
Mario Fernández de Echeverría, historiador novohispano los describe como: “pastelitos de masa de maíz, rellenos de diversos guisados de carne y pescado en figura de bollo, envuelto en las mismas hojas de las mazorcas del maíz, y cocidos dentro de una olla de barro sin agua”. Haciendo hincapié en que eran preparados solo por los indígenas para sus fiestas, a las cuales se añaden las que los misioneros les inculcan durante el virreinato.
De ser un platillo solo consumido por los indígenas, se comenzó a servir en las grandes mesas de las señoriales casas que siempre buscaban presumir la mejor receta de la familia en las fiestas religiosas, patronales, bautizos, primeras comuniones, sin olvidar la navidad, año nuevo y claro, los Tamales para la Candelaria.
Y así como sucedió con los tamales que se consumen en el centro del país, también se hicieron más interesantes y sabrosos los del interior del país dando como resultado un estimado de más de 500 recetas de tamales y miles, varios miles de formas de prepararlos.
También se sabe en la actualidad que los tamales no siempre se prepararon al vapor, ya que en la antigüedad los cocido al rescoldo – sobre brasas de carbón o leña -, y que no solo se han usado las hojas de maíz o totomoxtle, también hojas de árboles y después, cuando llegan los plátanos a nuestro país, con las grandes hojas de estos árboles.
Así que ya saben, comer tamales en febrero en México no es cosa de la conquista, ni solo para la candelaria. Uno come tamales cuando quiere y punto.