por Luis Mario Vargas
¿El lunch de tus hijos es tu prioridad mientras lo preparas para ir a la escuela? Lo que todo padre quiere es que sus hijos aprendan lo más posible durante su jornada escolar, que sus jóvenes mentes absorban todo el conocimiento que sus profesores transmitan a lo largo del día en el aula. No obstante, un aprendizaje óptimo no depende únicamente del alumno o el profesor, y mucha gente no le da importancia, cuando en realidad, es lo primero que se debe tener en consideración cuando llevamos a los niños al colegio por la mañana: la alimentación.
La mente de un niño trabaja mucho más rápido que la de un adulto, y a eso agréguenle todas las calorías que queman durante el recreo (o durante la entrada a la escuela) mientras juegan al fútbol, básquetbol, saltar la cuerda o a las atrapadas. Esto, con el pasar de las horas, genera los conocidos “bajones”, que no son más que reacciones del cuerpo después de quemar más calorías de las que ingirieron los pequeños durante el desayuno o el lunch. Porque, sí, estar sentando en un salón de clases escuchando al profesor mientras se busca entender y aplicar la teoría, representa un gasto mayúsculo de calorías para una persona. En estos momentos en los que el cuerpo tiene la batería baja, el cerebro se esforzará por mantener las funciones vitales del cuerpo como respirar, circulación de la sangre y muchas más. Entender lo que dice el profesor se volverá la última de las propiedades para el órgano central de nuestros hijos. A esto, añada que un pesado sueño comenzará a apoderarse de él.
Ahora, bien, seguro se estará preguntando ¿cómo evito que le pase esto a mi hijo en la escuela? Pues muy sencillo. Además de asegurarse que el niño tenga un descanso apropiado para su edad, de al menos ocho horas diarias, debe proporcionarle a su pequeño una serie de alimentos que le brindarán a tu hijo todos los nutrientes necesarios durante el desayuno y la hora del recreo. Es importante que tu niño coma en el recreo, pues uno debe comer al menos cada tres horas para evitar estos bajones y para hacer que el metabolismo siga trabajando.
Avena
Este cereal es de los más beneficiosos para el cuerpo humano, además de ser barato. Contiene un alto nivel de proteínas, grasas saludables y beneficia al sistema nervioso debido a que contiene vitamina B12. Además, si se consume constantemente, fortalece al sistema inmunológico y es muy difícil pescar un resfriado.
Puedes preparárselo a los pequeños con un poco de agua o leche, y métela un minuto al microondas. Para agregar un toque dulce le puedes agregar una cucharadita de miel, un plátano o una manzana en rodajas.
Zanahoria
Gracias al antioxidante betacaroteno, esta verdura ayuda a tener una mejor memoria y capacidad de retención. Gracias a su alto contenido de fósforo y potasio, es eficaz en tratar a las mentes cansadas. Es ideal para el lunch, y puedes mandársela a tus niños rayada en un contenedor de plástico con limón y un poco de sal o chile en polvo.
Nueces
Estos deliciosos frutos secos son ideales para llevar a cabo cualquier actividad intelectual, ya que fortalecen al cerebro por su contenido de grasas buenas, proteína, fósforo y vitamina B. Es ideal para aquellos niños que prefieren jugar una cascarita en el recreo a comer, pues se las puedes mandar en un pequeño contenedor de plástico como botana, y las comerá rápido. También puedes añadírselas en su avena en el desayuno.
Huevos
En la yema de este alimento contiene una sustancia denominada Colina, el grupo de vitaminas B. Para un niño pequeño quizá deberás darle sólo un huevo en el desayuno, pues a largo plazo puede elevar el nivel de colesterol.
Atún o anchoas
Quizá este es el alimento de la lista que puede ser más fácil que tus hijos coman. El atún puedes dárselo en forma de sándwich, o si tu pequeño es un poco más exigente, puedes darle anchoas en un toper o contenedor de plástico con unas cuantas galletas saladas. El atún se lo puedes dar también como ensalada, acompañado de verduras y mayonesa. El pescado es un alimento vital para el fortalecimiento del cerebro.
Plátano
Esta deliciosa fruta es ideal si tu hijo practica un deporte además de asistir a clase, pues gracias al nivel de potasio que posee, evitará que le den calambres. Asimismo, dentro del aula, gracias a la fructosa (azúcares buenos) y el buen nivel de carbohidratos que contiene, mantendrá a tu hijo con energía y, por ende, con una mente despierta. Es ideal para un lunch fácil y rápido de ingerir para los chicos antes de continuar con su juego.
Arándanos
Poseen una gran cantidad de vitamina C y antioxidantes que fortalecen la memoria a largo plazo. Puedes agregarlos a su avena del desayuno o, conseguir una mermelada de arándanos de buena calidad y dársela en pan tostado, o como sándwich.
Leche
Este lácteo es básico desde hace muchos años en la formación intelectual y física de los niños, pues gracias a su alto nivel de proteínas y vitamina B12, fortalece al cuerpo y evita el riesgo de un significante deterioro mental. Quizá sea demasiado pesado para tomar durante el lunch, y más si los chicos van a realizar actividad física, pero es perfecta para incluirla en el desayuno.
Espero que este artículo le haya sido de ayuda y le haya brindado algunas opciones para que la hora del desayuno y el lunch sea más divertido para los más pequeños de la casa. Así, mientras ellos se divierten, usted estará tranquilo o tranquila de que está maximizando su capacidad de aprendizaje mientras descubre el mundo a su alrededor.
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