Por Elsie Méndez @sabormexico
Una de las cosas que mas me gusta de hoteles ubicados en grandes casonas o propiedades que son parte de la historia de una ciudad es que no se parecen a ninguna otra y la sensación al estar hospedada en ellos es no es la de un hotel, mas bien pareciera que estoy de visita en casa de un familiar o amigos, ese es el caso de Hotel Villa María Cristina en Guanajuato.
Detalles que marcan el buen gusto y la elegancia de este hotel comienzan con la distinción de pertenecer a Relais & Chateaux, solo hay tres en México, ropa de cama, toallas y hasta sus batas por las que cualquiera pierde el estilo y se la lleva a casa de la marca Fiore, muebles de la afamada firma Roche Bobois, teléfonos y equipos electrónicos de Bang & Olufsen, pinturas originales de Jesús Gallardo en cada habitación y murales de Gorki Gonzalez que visten los patios, y hasta tinas de hidromasaje en las habitaciones de Kohler, con los que logran dar el toque de antaño con lo mejor de la modernidad del siglo XXI. Durante nueve días estuve hospedada en este hotel que no hizo mas que provocarme desear que las horas y los días pasaran lento para gozarlo el mayor tiempo posible.
Desde mi llegada confirme lo atinado de mi elección al hospedarme aquí, porque llegue muy entrada la noche y solicite que me dejaran listo en mi habitación un refrigerio y no tener que salir pasada la media noche para comer algo, pues no solo me lo llevaron hasta el cuarto, el personal de cocina me espero para garantizar que estuviera recién hecho y llevármelo tan pronto me instale, comenzamos con el pie derecho. Hubo días que desayune en su comedor en una mesa ubicada junto a la fuente que con el susurro del agua mis mañanas comenzaban de forma relajada y feliz sobre todo porque como muchos otros huéspedes, me ponía la bata y así salía sin el menor apuro, pero algunos otros decidí quedarme en la cama y hasta ahí llego mi comida.
Hotel Villa Maria Cristina, Guanajuato
Terrazas, patios, jardines y escaleras conectan a las diferentes áreas del hotel, y desde muchas de ellas tenia la vista del cerro de la bufa, donde disfrute de cocteles de aperitivo y otras mas para comer y cenar. Mi favorita de todos estos espacios es la terraza de la parte más alta del hotel con un jacuzzi abierto para cuatro personas y que en esta ocasión fue solo para mi, eso me gusta de quedarme rondando por ahí cuando la mayoría de los huéspedes andan de paseo o trabajando. Aunque la estructura del hotel es de varios niveles y para llegar a ellos hay que usar escaleras cuentan con un elevador para quienes tienen algún impedimento y que puedan tener acceso a el salón comedor, y por supuesto a las habitaciones.
Mi habitación es de las mas espaciosas pero de las que tienen mejor vista es Gabriela o Luisa y Mariana para los que vienen de romance o luna de miel, porque en este hotel no son números son nombres de los familiares de las mujeres de la familia para distinguirlas, algunas de ellas cuentan con tina de hidromasaje enorme, hay algunas otras como las suites patio que en vez de la tina tienen vapor integrado en la regadera; amenidades de la marca LÓccitane, y los muebles de la marca que les mencione antes. Por estas cosas es que fue nombrado “Must excelent hotel 2012” y es finalista en el 2013 de México y Centroamérica por Conde Nast Johansen. Hasta el momento cuentan con 13 habitaciones pero en breve serán mas de 30 con la nueva extensión que harán del hotel al haber adquirido las casas vecinas y además contaran con una suite presidencial.
El spa es una maravilla muy bien equipado con áreas para masaje, vapor, sauna, y una alberca estilo romano esplendorosa, y productos de Natura Biseé, pidan con un día de anticipación los servicios de masaje y faciales preferentemente o temprano por la mañana si es que desean tenerlos por la tarde noche. También cuentan con un pequeño gimnasio que cuenta con equipos básicos pero suficientes para quienes desean hacer ejercicio, si es que las caminatas por la ciudad no fue suficiente.
Huevos estilo chiapas, Hotel Villa Maria Cristina, Guanajuato
De su restaurante les puedo platicar que se come muy bien, el concepto de su alta cocina mexicana esta basada en los productos locales con recetas y técnicas internacionales que el chef Mauricio Navarro ha ido adaptando y creando para el hotel; Mauricio fue discípulo de Paul Bocusse y ello nos da una idea de sus excelentes propuestas para el gozo de quienes se hospedan en este hotel, aunque no es exclusivo para ellos, si andan por Guanajuato no dejen de visitarlo. Desde el desayuno hasta la cena, los platillos de este restaurante son variados y muy bien presentados, pero sobre todo el sazón de Mauricio inspirado en las recetas de la región con su toque personal. Les recomiendo mucho los huevos estilo Chiapas para el desayuno y de comida la sopa de frijol y los tacos de chiles pasilla con requesón.
Otro punto importante es el servicio gratuito del uso de la conexión a internet, ya que en la gran mayoría de los hoteles tiene costo adicional y en Hotel Villa María Cristina es de uso abierto y libre para sus huéspedes.
La reina Beatriz con los actuales reyes Alexander y Máxima de Holanda, Johnny Depp, Tim Burton, el maestro y Chef Juan Mari Arzak, entre otras personalidades han sido visitantes distinguidos de este hotel y se entiende porque de su elección al momento de vivir de cerca la experiencia de hospitalidad y servicio del personal dirigido por Nelson Pardeiro de Villa María Cristina, uno se siente, sin serlo, un personaje importante gracias a todos ellos.
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