Por Elsie Méndez @sabormexico
Colorado es uno de los estados de la Unión Americana que más me gustan. La enorme variedad de opciones que existen para disfrutar en familia, amigos y hasta en solitario, sumadas a sus hermosos paisajes, hace de este destino, un paraíso para quienes buscamos nuevas aventuras en nuestras vacaciones.
Colorado Springs y Manitou Spring, son de esos lugares que muchos encontrarán, como yo, muy divertidos, llenos de historia y, con un sin fin de actividades que los dejaran con ganas de regresar una y otra vez. Para llegar a estas dos ciudades uno puede volar vía Dallas o Houston para después tomar un vuelo directo a Colorado Springs. Ambas ciudades se encuentran a las faldas de la montaña más famosa de toda la Unión Americana, Pikes Peak, la cual es visitada anualmente por miles de alpinistas y exploradores de todas partes del mundo.
Después de una visita por estas dos ciudades, les comparto una pequeña guía de viajes, que les ayudará a planear mejor sus vacaciones a estos destinos.
Si bien la gran mayoría de los pueblos y ciudades que se fundaron en Colorado nacieron gracias a la minería y la ganadería, lo que hizo atractivo a Colorado Springs, desde sus inicios, fue su increíble clima y cultura. Sus primeros habitantes fueron los indios americanos, quienes descubrieron las aguas minerales y termales que se encuentran en esta región, y sus grandes beneficios para la salud.
Fundada en 1871, Colorado Spring, paso, de ser un pintoresco centro turistico con aguas termales en la época victoriana, a una sofisticada y gran ciudad (la segunda más importante del estado), pero conservando su ambiente pueblerino. Durante todo el año, sus paisajes son asombrosos y coloridos, y sus habitantes son gente cordial que siempre nos hacen sentir bienvenidos.
Esta ciudad es conocida también como “La Capital Mundial del Deporte”, en la cual esta establecido el complejo con el Centro de Entrenamiento Olímpico de los Estados Unidos de America. Es además, sede de la Academia de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, ambos, pueden ser visitados en recorridos especiales para los turistas.
Colorado Springs ofrece actividades culturales que incluyen visitas al Pikes Peak Center, el Museo de los Pioneros, el Museo de la Asociación Americana de Numanística y Dinero, y el disfrutar de un concierto con la Filarmónica de Colorado Springs.
Un imperdible durante un viaje a Colorado Springs es la visita al Jardín de los Dioses (Garden of the Gods) el cual no es un parque nacional, es el parque público más grande del mundo. Enclavado en las cercanías del Pikes Pieak, sus impresionantes formaciones rocosas de color rojo son el centro de actividades que incluyen senderísmo, paseos en jeep, paseos en caballo, áreas para picnic, y mucho más. En su nuevo centro de visitantes podrán encontrar ayuda para organizar de la mejor forma su visita, además de conocer de cerca las especies e historias sobre a este increíble lugar.
El Royal George Route Railroad se encuentra a solo 45 minutos de la ciudad de Colorado Springs, y nos permite disfrutar de grandiosas vistas del río Arkansas, el cañón y admirar de cerca el puente colgante más alto del mundo. Durante el recorrido dentro de este tren escénico, se ofrecen deliciosas experiencias gastronómicas, que incluyen degustaciones de vino y cerveza, una amplia carta con platillos como las hamburguesas de búfalo y, durante los fines de semana, menús de degustación con platillos exclusivos para estos recorridos, con ingredientes orgánicos y locales, creados especialmente por el chef ejecutivo del tren.
Sus atracciones especiales incluyen un espectáculo que nos traslada en el tiempo del lejano oeste, donde vaqueros e indios se pelean a tiros, cenas al estilo de esas épocas, ciudades fantasmas, recorridos a barrancos donde todavía habitan los indios americanos, recorridos por los rápidos en balsa, cabalgatas, visitas a minas, casinos, y paseos en globo aerostático.
Para hospedaje les recomiendo el hotel The Broadmoor, que es, en si mismo, un destino dentro de otro destino. Este hotel ha sido protagonista importante en la historia de Colorado Springs, y ofrece una oferta gastronómica inigualable, además de unas instalaciones que los dejarán pasmados. Este hotel merece una visita y disfrutar de alguno de sus exclusivos restaurantes, si es que deciden no hospedarse ahí.
Se dice que la palabra Manitou significa “gran espíritu”, y al igual que Colorado Springs, sus primeros pobladores fueron indios americanos, quienes ofrecían ceremonias especiales, para que, del centro de la tierra, siguieran emergiendo esas aguas que encontraron eran buenas para su salud. Manitou Springs fue de los primeros centros turísticos en los Estados Unidos, a donde llegaron cientos de visitantes de la época victoriana en busca de salud y curación por sus aguas curativas y el aire fresco de la montaña, convirtiéndolo, en un centro de salud muy importante para los enfermos de tuberculosis del siglo XIX.
Este pequeño y pintoresco pueblo, es el lugar a donde uno puede ir de esquina en esquina, probando las diferentes aguas que emergen del subsuelo, cada una con un sabor y característica especial, gracias a las fuentes que se localizan en puntos estratégicos del poblado. El simple recorrido de cada una de ellas, hace de nuestro día algo totalmente diferente a cualquier otro destino.
En su calle principal, encontrarán tiendas de artesanías, galerías de arte, tiendas de antigüedades, pequeños locales con cocina muy local y tradicional, restaurantes con conceptos mucho más sofisticados, además de poder admirar los edificios históricos que han restaurado como parte de las atracciones de este destino.
Otra de sus atracciones es el Castillo de Miramont, el cual es una visita obligada. Esta mansión histórica alberga el museo de la ciudad, el cual tiene como misión, el preservar y restaurar la integridad arquitectónica y proporcionar experiencias educativas sobre la historia de Manitou Springs, su gente y artefactos indígenas. Parte de sus atractivos es experimentar la vida de la época victoriana, a través de la importante colección de muebles auténticos en sus más de 30 habitaciones, y en el Salón de Té de la Reina, podrán disfrutar de un almuerzo como se vivía en esos tiempos.
Por supuesto una de las actividades principales en Manitou Springs es poder disfrutar de un día de spa que incluye tratamientos con las aguas termales que tan famoso han hecho a este destino.
Para hospedarse les recomiendo el hotel The Cliff House at Pikes Peak. Una hermosa casona de 1800´s es el lugar que alberga este hotel. Hospedarse ahí, es como hacer un viaje en el tiempo de la época victoriana, gracias a la exquisita y cuidada decoración que han hecho en las 54 habitaciones que componen este hotel, cada una de ellas, con detalles únicos y diferentes entre las demás. Esta propiedad pertenece a la colección de hoteles históricos en los Estados Unidos, y tienen un reconocimiento de la AAA Four Diamond Resort.
Si requieren mayor información visiten las ligas de cada uno de los destinos antes mencionados, además de Discover America, el sitio oficial del organismo de turismo de los Estados Unidos.