Hermosillo. Tanto que hacer y tan pocos días en este viaje
Por: Carlos Dragonné @sabormexico
Fui hace muchos años, por una cuestión de trabajo con el apoyo del querido Sergio Cesaretti, pero la realidad es que no nos quedamos en Hermosillo en aquella ocasión. Apenas dormimos una noche ahí para salir por carretera a la mañana siguiente rumbo a Yécora. Así que no puedo decir que conocía la ciudad. Me pareció un gran momento para corregir eso. Tras algunas horas en carretera -después de una necesarísima estancia en Ciudad Obregón-, apareció el anuncio esperado: Bienvenidos a Hermosillo.
Primera pregunta, ¿cómo llego a Hermosillo?
Esta ciudad es de las que requiere varios días para gozarse. Pareciera que en México salir de vacaciones implica los destinos de siempre: Acapulco, Cancún, Monterrey, Vallarta, San Miguel de Allende. Se nos olvida que tenemos una conectividad aérea impresionante y que varios de los mejores lugares para visitar están, literalmente, a tiro de piedra. Muchas ciudades vuelan a Hermosillo, incluyendo Ciudad de México, Monterrey, Guadalajara, La Paz, Chihuahua o Tijuana. Así que de dónde vengan hay cómo llegar.
Ahora que si vienen en carretera, entonces la aventura es enteramente distinta. Los Mochis puede ser su punto de partida, o La Paz. Incluso Phoenix y entran por Nogales. Si vienen del noreste del país, la carretera que conecta Chihuahua con Sonora es de las más hermosas que hay en términos de fotografías y destinos en el camino. Pueden parar en Yécora, Basaseachi, Álamos o Nacozari.
Y si se animan a tomar el auto y viajar desde la Ciudad de México, entonces sí tienen una ruta exquisita como la que armamos nosotros y de la que les hemos ido contando poco a poco. Porque en esta ruta van a tener que dedicarle tiempo a Guadalajara, Mazatlán, Culiacán, Los Mochis y Ciudad Obregón, por mencionar sólo algunas.
Ok. Ya llegué a Hermosillo. ¿Qué es lo primero que debo hacer?
Hermosillo es una ciudad de negocios, cultura y placer. Así que no tendrán problema en encontrar un buen hotel para quedarse las noches que hayan decidido. Nosotros nos decidimos por el City Express Hermosillo porque su ubicación nos permitía estar relativamente cerca de todo lo que nos habían recomendado para hacer.
Ya instalados, nos lanzamos a un clásico que nos había recomendado la querida Diana Miller: Tacos Armando. Si ustedes creen que el éxito de este lugar se debió a su aparición en la serie de Netflix están equivocados. Ya eran buenos y famosos desde antes. ¿Son buenos? Lo único que les voy a contar es que este lugar merece su artículo individual.
Sabiendo que teníamos poco tiempo para conocer y gozar de la ciudad, nos decidimos hacer caso a una recomendación de un guía que nos ayudara a recorrer diversos espacios de Hermosillo. Llegar a una ciudad de la que no sabemos mucho y recorrerla junto a alguien que sabe todos los secretos ayuda mucho.
La historia de un país en los barrios de Hermosillo
Recorrer Hermosillo es andar por sus espacios históricos y culturales. Desde el Museo de Culturas Populares e Indígenas con murales de Ethel Cooke y el Museo de la Revolución, Hermosillo tiene en sus calles la historia de México para descubrirse. Pero también tiene una gastronomía pura que vale mucho descubrir.
Nuestra primera parada fue el hoy Museo Regional de Sonora que es, de hecho, una antigua cárcel de la ciudad y que terminó adaptada como museo. Aquí hay gran parte de la historia del destino y sus paredes aún tienen vestigios físicos de esa historia revolucionaria. Un dato curioso del lugar, nos comentó Teto Moreno, nuestro guía imprescindible y a quien recomendamos si ustedes están en la ciudad, es que fue aquí donde se realizó la última sentencia de muerte de la historia de nuestro país.
Por ejemplo, Villa de Seris es el lugar perfecto si lo que estás buscando es un pedazo histórico colonial de nuestro México. Eso sin tomar en cuenta la delicia que puede ser probar las tradicionales coyotas o jamoncillos. Este lugar con una de las iglesias más antiguas de la ciudad encierra en sus callejuelas la defensa de tradiciones indígenas y de la construcción de barrios que generan identidad.
El mejor atardecer de Hermosillo.
En el Cerro de la Campana puedes gozar de una vista de la ciudad entera. No sólo estamos en el origen de muchas de las construcciones de la ciudad, porque la cantera salía de aquí. Es, también, un refugio de la cultura yaqui y tiene rzón de ser. Al final, este espacio que concentra la identidad de todo Hermosillo fue el punto de referencia para las culturas indígenas y para los españoles a su llegada a estas tierras.
Teto Moreno, nuestro guía, un emprendedor de la ciudad que es, por mucho, un apasionado de la historia que se escribe todos los días en Hermosillo, nos contó historias sobre la gente y la forma en que este espacio representa un punto de encuentro que no permite divisiones o rivalidades. Es, además, el lugar perfecto para entender la división del valle entero.
Ver cada lado de la ciudad con la explicación de Teto sobre los protagonistas de Hermosillo y las historias de familias que construyeron la ciudad y que fueron desapareciendo una vez que el mapa natural de Hermosillo estaba trazado.
Dónde comer en Hermosillo. Hay para todos los antojos
Ya habíamos hablado de los famosos Dogos de Ciudad Obregón y en ese artículo les platicaba sobre el pleito entre ellos y Hermosillo por hacer los mejores y más famosos. Opciones para disfrutar los famososo dogos hay casi en cualquier esquina, así que no fallarán encontrando uno. No les diré cuáles creo que son mejores para que no entremos en controversias innecesarias.
Uno de los restaurantes insignia de la ciudad de México tiene su origen aquí. Palominos tiene historia familiar y de producto local. Abierto en 1974, este espacio que ha ido creciendo y posicionándose en los puntos clave de México presume el decirse «orgullo de la gastronomía sonorense«.
