Por Luis Vargas
El otoño ya llegó, sólo faltan unos cuantos meses para que llegue el invierno. Ya veníamos disfrutando de un clima cálido, donde podíamos andar libremente por la calle usando sólo una playera de manga corta y bermudas o pantaloncillos cortos. Sin embargo, el clima de otoño puede ser traicionero, y puede traer con él a la molesta y tan temida gripa. Por la mañana creemos que hará calor, y no es así. El siguiente paso: un descanso obligado con dolor de garganta, flujo nasal, fiebre y demás síntomas que nos alejarán de nuestras actividades cotidianas.
Recuerdo cuando un amigo me vio enfermo de gripa durante el otoño de hace unos años. Me dijo que comiera avena por las mañanas, antes de salir a la calle. Ambos entrenábamos juntos fisicoculturismo, así que le hice caso y comencé a comer avena por la mañana y no por las noches como lo venía haciendo. ¿El resultado? Desde hace cinco años como avena todas las mañanas y si me enfermo de gripa una vez al año, ya es mucho.
Así que, para que usted no caiga presa de la gripa en este cambio de estación, y tampoco los suyos, le presento a continuación cinco alimentos que fortalecerán sus defensas. Y lo mejor de todo, es que son sencillas de conseguir y de consumir, nada de complejos batidos ni mezclas. Se trata de que incorpore pequeños hábitos en su vida diaria, pero que traigan grandes cambios.
Avena
Como mencioné antes en este artículo, la avena ha traído grandes beneficios a mi vida. Son carbohidratos simples, lo cual quiere decir, que no engorda. Al ser un cereal, que además una buena cantidad de proteína a nuestro organismo. Entre más proteína consumamos, más fuerte será nuestro sistema inmunológico, volviendo a la avena el enemigo perfecto para la gripa. Consumirla es muy fácil. Puede comprarla en el supermercado (es muy barata), y sólo añadirle agua y un poco de azúcar, para después meterla al microondas por un minuto, y listo. También algo que hago personalmente, es beberla con un poco de leche, huevo y plátano. Si usted practica alguna actividad deportiva de alto rendimiento, esta es una gran opción. Incluso puede añadírsela a un poco de fruta con miel. Ojo, no compre la versión que viene en sobrecitos con saborizantes de manzana, canela o cualquier derivado, pues esta presentación contiene cantidades de azúcar y resultará contraproducente.
Nueces y avellanas
Cualquier tipo de nueces (excepto los cacahuates japoneses ni nueces garapiñadas) deberían estar en la dieta de todo el mundo. Son grasas vegetales que nos proporcionan energía. Aunque algunos medios se han encargado de darle un significado negativo a las grasas, éstas son en realidad muy importantes tanto para el rendimiento físico, sexual e incluso, mental. Es común entre deportistas que tengan como snacks un puñado de nueces o avellanas, pues es, junto con la proteína, vital para el aumento de testosterona, y con ello, el aumento de masa muscular y buen desempeño sexual. También es importantísimo que las mujeres consuman este tipo de grasas.
¿Y cómo previene la gripa?, se estará preguntando. Al ser ricas en calorías, las nueces aumentan nuestra temperatura corporal, dándonos un plus de calor en estas épocas del año que tanto lo necesitamos. Más grasa, igual a más energía y más calor. Por algo los animales comen mayor cantidad de grasa durante el invierno, por eso los fisicoculturistas aumentan masa en invierno, y por eso, cuando hace frío, su cuerpo le pide más comida. La naturaleza es sabia, ¿no cree?
Miel
Esta deliciosa opción ha sido desde tiempos inmemoriales, uno de los remedios preferidos para tratar algunos síntomas de la gripa. Seguro se habrá topado con las típicas pastillas de miel para aclarar la garganta y reducir la tos. Y es que la miel tiene un alto contenido de inhibidinas, que son sustancias que le otrogan una capacidad bactericida y antiséptica. Si la miel puede reducir considerablemente algunos malestares de la gripa, imagínese lo que puede hacer si la toma como una medida preventiva.
Puede consumir la miel como endulzante para su café, en vez de azúcar (una cucharadita debe bastar), o bien, de un té. Puede también desayunar una porción de fruta con avena, bañado de miel. O si de plano, ya no tiene tiempo, tome una cucharadita antes de salir por la mañana al trabajo. Combatir la gripa nunca fue tan dulce.
Yogurt
Otro alimento que puede servir como escudo contra la gripa, es el yogurt, ya que las bacterias que contiene resultan ser beneficiosas. Estas bacterias son la Lactobacillus bulgaricus y el Streptococus thermophylus, y tienen valores probióticos, es decir, a favor de la vida. La función de estas bacterias benéficas se centra en el intestino, ayudando a potenciar y elevar las defensas del sistema inmunológico.
De preferencia, consuma yogurt griego, pues tiene muy poca azúcar, es bajo en carbohidratos y muy alto en proteína. Pero el yogurt de frutas que encuentra en el supermercado no tiene por que resultar contraproducente en la salud si no se consume en exceso.
Lentejas
Este delicioso platillo es uno de los favoritos de las mamás, y además de saber exquisito, son potencialmente eficaces contra la gripa ocasionada por el cambio brusco de temperatura. Las lentejas contienen zinc, potasio, magnesio, vitamina B e hidratos de carbono, las cuales activan la producción de glóbulos blancos. Estos microorganismos combaten las bacterias. Y sí, eso incluye combatir el virus de la gripa que flota en el ambiente por estas fechas en la que el contagio está a la orden del día.
Como puede ver, subir sus defensas es muy sencillo. Estos consejos que le presento son muy fáciles de incorporar a su rutina diaria o a la de sus hijos. Además, no se trata de alimentos insípidos o poco apetitosos, sino de deliciosas opciones que le brindarán una ayuda extra a que la gripa no se vuelva su acompañante en esta temporada de frío. Ojalá le hayan funcionado estos consejos.
